El fútbol estuvo parado. El COVID-19 hizo de las suyas. En Europa volvió. En Argentina, si entrenabas por tu cuenta, era ventaja deportiva. Pese a esto, los clubes se vieron obligados a levantar teléfonos y tantear el efectivo de sus billeteras.
Godoy Cruz no fue la excepción. El Tomba se movió rápido, pero siempre con el mismo radar de refuerzos. El Expreso suele comprar barato, y vender caro.
Tres incorporaciones. Uno por línea. Uno que meta goles, otro que ayude tanto a la distribución como a la defensa, y el otro que evite los avances del rival.
El primero en poner la firma: Renzo Tesuri. El volante, con cualidades ofensivas por las bandas, llega desde Ferro, donde disputó 42 partidos oficiales, con 8 goles. Godoy Cruz compró el 50% del pase del jugador, por 300 mil dólares.
El que llegó después: Gonzalo Goñi. Defensor de 21 años, con paso por Boca Juniors, y llegado desde Estudiantes de Buenos Aires, firmó contrato hasta 2023. En su última etapa en su club, disputó 18 partidos, y convirtió un gol. El Tomba adquirió la mitad de la ficha por 200 mil dólares.
El recientemente llegado, pero no se sabe si último, Alan Cantero. Delantero de 22 años, con último paso por Sportivo Peñarol. En su historial lleva disputados 30 partidos, con 6 goles a su favor. Firmaría por tres años.